La Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA) destituyó discretamente al director regional de la agencia para México, Centroamérica y Canadá, Nicholas Palmeri, por contactos inapropiados con abogados de narcotraficantes.
Registros confidenciales revisados por The Associated Press, arrojaron que el exfuncionario socializó y vacacionó con abogados de Miami que representan a narcotraficantes.
La contraloría interna del Departamento de Justicia encontró otras irregularidades durante la gestión de Palmeri, como el uso de fondos de la lucha contra las drogas para otros propósitos, y solicitó que se le reembolsaran con el fin de pagar su propia fiesta de cumpleaños.
“El puesto de director regional en México es el más importante de las operaciones extranjeras de la DEA, y cuando ocurre algo como esto, es problemático”, dijo Mike Vigil, exjefe de operaciones internacionales de la agencia.
La dependencia decidió no presentar cargos penales contra el funcionario, asegura el informe del Departamento de Justicia.